Propuesta de un plan piloto para la gestión y manejo integral de los residuos sólidos domiciliarios (RSD) en la localidad de Labranza / Nicole Solange Miranda Guerra; Profesor guía: María Eugenia González Quijón.

Tesis en formato PDF.

Acceso exclusivo en PC Tesis y Revistas.

Incluye índice de contenidos, índice de tablas, índice de figuras, anexos.

Trabajo de título: (Ingeniero Civil Ambiental). -- Universidad de La Frontera, Facultad de Ingeniería y Ciencias, 2017.

Bibliografía: hojas 100-105.

El plan de manejo, es un instrumento de gestión integral de los residuos que contiene un conjunto de acciones, procedimientos que facilitan el acopio y las disposiciones de productos de consumo que al desecharse se convierten en residuos. Este plan piloto se encuentra enmarcado en un sistema integrado de gestión que abarca acciones como la reducción en origen, la reutilización, el reciclaje y el compostaje. El trabajo de título presente expone una propuesta de ingeniería conceptual sobre dimensionamiento de una planta valorizadora de residuos sólidos, asociada con un plan de gestión en la localidad de Labranza perteneciente a la Comuna de Temuco, donde la recolección de residuos sólidos domiciliarios (de aquí en adelante RSD), estará a cargo de la Municipalidad de Temuco. Considerando un nivel de separación desde origen apoyado con educación ambiental para posteriormente ser almacenados en planta y ser entregados a gestores de reciclaje. Para gestar un sistema de manejo integral de RSD se consideró la alternativa de la instalación de una planta piloto de compostaje por volteo para el tratamiento de los residuos orgánicos generados por un sector de Labranza y recolectados por un camión compactador tres veces por semana, en conjunto con un centro de acopio de residuos reciclables dentro de la misma, donde la gestión de la comercialización se realizará con convenios entre la Municipalidad y las empresas dedicadas al reciclaje ya establecidas en la región. Se tomaron muestras y se caracterizaron los RSD con el método del cuarteo, en los sectores cercanos al terreno donde se emplazaría la planta piloto para 4500 habitantes, estas fueron; villa Los Jardines, Ruka tamy, Los Reyes y José Muñoz Concha, distinguiendo además los siguientes componentes, como la cantidad de viviendas atendidas, y el estrato socioeconómico de la población estudiada, que en su mayoría pertenece en a un estrato socioeconómico medio-bajo. Respecto a los resultados se obtiene que la cantidad de residuos generados por el sector de Labranza es de 0,64 kg / persona / día, lo que se traduce en un total anual de 233,6 kg / persona. Se estimó un total de residuos que ingresarían a la planta piloto de 0,11 toneladas de papel y cartón (3,9%), 0,07 toneladas de vidrio (2,3%), 0,06 toneladas de metales (2%), 0,24 toneladas de plástico (8,2%), 1,96 toneladas de material orgánico (67,9%) y 0,1 toneladas de tetra pack correspondiente a categoría Otros (3,7%). Además, se generaron 0,12 toneladas de textiles (4,2%) y otros con un 7,6 % de rechazo, totalizando una generación de 2,88 toneladas al día, de los cuales el 84,3 % son recuperables para una población de 4500 habitantes, lo anterior implica que es posible recuperar 2,43 toneladas diarias y que cada año es posible recuperar 886,22 toneladas. Para el proceso de compostaje, se consideró que la alimentación al sistema después de la reducción del tamaño del material fresco, tendrá un volumen mensual de 114,6 m3. Se estimó que el volumen de compost producido anualmente será de 167,22 m3, y que la masa total de compost final producido correspondería a 108,69 toneladas al año, considerando un proceso productivo de duración de seis meses. El área requerida para la cancha de compostaje, considerando la sección de descomposición y maduración tiene un total de 1422 m2. Para la clasificación y acopio de materiales reciclables se estimó un área total de 125 m2. Y la superficie mínima requerida para la implementación total de la planta piloto con capacidad anual de 1051,2 (ton/año), como alternativa de gestión de los RSD, correspondería a 2700 m2. Para el desarrollo y funcionamiento de la planta piloto es fundamental la implementación de la educación ambiental en el sector atendido, por lo que se propone un programa con talleres de sensibilización, talleres de capacitación sobre separación de RSD en origen, promoviendo el reciclaje, considerando una fase de evaluación y seguimiento mediante encuestas, entre otros.

1